viernes, 24 de octubre de 2014

39. Nos llevamos el estudio a la ciudad


Y por qué conformarnos con un mejor, peor, mayor o menor estudio fotográfico; si tenemos la ciudad a nuestros pies llena de posibilidades.

Así solemos hacer en nuestros books, y así hicimos con el gran actor Javier Recuerda.

Utilizamos el sol de la tarde, que brilló en esta ocasión fuerte, directo, y con colores otoñales maravillosos a los que pudimos sacar mucho partido unas veces, y tuvimos que suavizar otras para no parecer iluminados por auténticas llamaradas. :)




Primer decorado interesante: una antigua nave abandonada (tan oportunas siempre para sesiones de fotos...)
Aquí elegimos un blanco y negro para potenciar la luz, la estructura de la nave, las sombras largas proyectadas en el suelo a esa hora de la tarde, la mirada bohemia del chico del gorro...



Pero también quisimos usar el color para contar lo que estábamos viviendo. Para ver los colores de las paredes, de la luz, de Javier.
Como la luz del sol era demasiado dura, hicimos fotos a la sombra, desviando la luz hacia nuestro artista con un reflector, en este caso dorado. Y esto fue lo que salió:



Entre sesión y sesión, después de acabar las fotos con un vestuario o antes de empezar con otro, siempre aparecen momentos de relax. Sin embargo estos descansos no deben pillarnos desprevenidos. Nuestro modelo se relaja, y su encanto natural se expande más que nunca. No hay que dejarlo escapar ;)



En la ciudad disfrutamos de todo tipo de decorados: parques, árboles, edificios, calles,... pero a veces, se echan de menos los fondos lisos para hacer primeros planos, retratos, donde el decorado no nos atiborre de información.
No nos engañemos, en la ciudad podemos encontrar todo tipo de fondos lisos para este tipo de fotos.
Aquí dos ejemplos. En ambos casos tuvimos que usar un difusor que suavizara la luz directa del sol.
En todos los casos, la diversión y la relajación del modelo (y del fotógrafo) es lo más importante :)



Está atardeciendo en la ciudad, y no queremos perdernos este momento épico.
Velocidad de obturación rápida para captar los colores del atardecer, pero no los detalles de la ciudad; diafragma abierto para difuminar el fondo, y luz artificial para iluminar al modelo en primer plano. Para hacer que la luz le llegue de lado, utilizamos el flash sobre el reflector plateado.



Y ya con apenas luz solar, tenemos que darnos prisa y acertar a la primera en las últimas fotos.
Iluminación con flash, y decorado metálico estupendo para fotos de boxeo. Casi casi como un ring en un gimnasio modernito... 
Solo que esta vez era un parque, de cualquier ciudad...


¡¡Muchas gracias por confiar en nosotros, Javier!!

Puedes ver el book completo de Javier Recuerda en